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¿Por qué estudiar Información y Documentación?
Los profesionales de la archivística, la biblioteconomía y la gestión de la información y documentación desempeñan un papel fundamental en empresas e instituciones públicas y privadas de todo tipo. Se encargan de conservar, controlar, gestionar y garantizar el acceso y uso de toda aquella información y documentación que tanto las organizaciones como los individuos necesitan para el desarrollo de sus actividades.
Los estudios de Información y Documentación tienen su origen en la famosa Escuela Superior de Diplomática, creada a mediados del siglo XIX para instruir de manera específica a los profesionales del Cuerpo de Archiveros y Bibliotecarios. A partir de 1900, esa preparación se integra en la Universidad y desde los años 70 existe una formación específica para los profesionales de la Documentación, expertos en Bibliotecas, Archivos y Centros de Documentación.
En la actualidad se imparten es esta Facultad el Grado en Información y Documentación y los siguientes másteres oficiales: Máster en Gestión de la Documentación, Bibliotecas y Archivos, Máster en Documentación Fotográfica. Recuperación, Tratamiento y Difusión y el Máster en Patrimonio Histórico Escrito (en colaboración con la Facultad de Geografía e Historia). Así mismo se ofertan el Máster Propio en Edición (junto con Santillana Global) y una amplia variedad de cursos de Encuadernación. Por último tras el postgrado se oferta el Doctorado en Documentación.
Para que conozcas mejor las posibles salidas laborales del Grado en Información y Documentación, te ofrecemos algunos datos útiles extraídos de fuentes independientes:
1. Altas tasas de empleabilidad
Según el portal oficial “Qué Estudiar y Dónde en la Universidad” (QEDU), estudiar en una universidad u otra puede suponer una variación de hasta casi un 40% en tus oportunidades de trabajar en este sector:
La Universidad de Barcelona tiene las mejores tasas de inserción laboral en Información y Documentación del país (70% a nivel Licenciatura/Grado), seguida muy de cerca por la Universidad Complutense de Madrid (68%), Universidad Carlos III de Madrid (60%) y la Universidad de Valencia (59%).
Asimismo, según el mismo portal oficial QEDU, en 2014 el 57% de los titulados a nivel de Grado estaban trabajando (un 48% de ellos con contrato indefinido), así como el 72% de los titulados a nivel de Máster (un 45% de ellos con contrato indefinido), superando la media nacional de todas las titulaciones (64%) así como a los titulados en otras carreras como Economía (68%), Periodismo (58%), Comunicación Audiovisual (55%), Sociología (54%) o Derecho (49%).
2. Salidas profesionales en todos los sectores productivos
La gran versatilidad de estos estudios también se traduce en un gran abanico de salidas profesionales. En la actualidad, algunos de los principales perfiles profesionales del sector son:
Gestor documental: se encarga de la gestión eficiente de los recursos informativos y documentales de una organización, a partir del marco normativo existente y de las necesidades de la organización, utilizando para ello las herramientas tecnológicas más innovadoras de que se dispongan en cada momento.
Diseñador y gestor de contenidos web y multimedia: se encarga de diseñar y gestionar páginas y servicios web, colecciones de materiales audiovisuales virtuales, stocks digitales de todo tipo de empresas dedicadas al comercio electrónico, etc.
Bibliotecario: se encarga de adquirir, describir, conservar y poner a disposición de la sociedad el patrimonio bibliográfico de determinada entidad u organización. Otras de sus funciones también son: mantener las colecciones, implementar políticas de catalogación o digitalización, diseñar una política de adquisición de colecciones, entre otras.
Gestor de comunidades virtuales (community manager): se encarga de actuar como intermediario entre los intereses de su empresa u organización y los de sus clientes o usuarios (actuales y potenciales), diseñando la estrategia y política de comunicación digital y gestionando los medios sociales de comunicación así como su actividad.
Consultor/analista de información: se encarga de ofrecer soluciones documentales a otras empresas, tanto de tipo organizativo (diseño de servicios), instrumental (tecnologías aplicables) como analítico (auditoría, análisis y síntesis de información). Este último resulta especialmente crítico para las organizaciones en el contexto actual de sobreabundancia y dispersión de la información, así como de las aplicaciones Big Data.
Gestor de servicios de información: los estudios superiores en Información y Documentación capacitan para la dirección de servicios de información (gestión de infraestructuras, recursos humanos, recursos documentales, marketing, etc.), tanto físicos como online.
Archivero: se encarga de conservar, proteger y difundir el patrimonio documental, con el fin de que puedan estar a disposición de la población. También bajo su responsabilidad recae el manejo de archivos administrativos, de manera que sea posible facilitar una mejor gestión administrativa y fomentar el acceso a la información.
Los servicios de información y sus profesionales pueden encontrarse en todo tipo de organizaciones (organismos de la administración pública, fundaciones privadas, etc.), si bien en los últimos años el empleo se concentra en el sector privado (medios de comunicación, empresas de consultoría, etc.).
3. El salario de estos profesionales oscila entre 18.000 y 30.000 euros al año
Precisamente por la variedad de puestos y actividades que estos profesionales pueden desempeñar en los distintos sectores productivos, no es fácil conocer su rango salarial. Una aproximación nos la brinda la página especializada Tusalario, para la que los salarios medios de los profesionales del sector están entre los 18.000€ y los 30.000€ anuales.